
De los pocas cosas que hicimos de turismo, una fue ir a ver la estatua de la libertad. Pero no. No os penseis que fuimos a la propia isla de la estatua. Eso es de ricos. Nosotros estamos en rollo supervivencia. Ya sabeis, Central Park de lejos, etc.. Sin embargo, Nueva York también está hecha para pobres (hay muchísimos sin techo (coño, como nosotros, sin piso ni na!). Así que cogimos el ferry gratuito que a modo de puente aereo conecta Manhattan con Staten Island. Está muy bien, tarda media hora y funciona las 24 horas del día. Desde el ferry, se ve la estatua (como siempre, de lejos, todo de lejos). Es ENANA. Es lo único pequeño aquí. La libertad. ¿Que irónico no? Aquí parece que todo el mundo hace lo que le da la gana. Ayer hablé con un quiosquero, era la 1 de la madrugada. Le pregunté si cerraba de noche y me dijo que sí, que claro, que tenía esposa e hijos. Le pregunté su horario. Y me dijo que de 7.30 am a 3.00 de la madrugada. Solo duerme 4 horas y media. Eso si, le daban media hora para comer y media para cenar. 7 días por semana. ¿Es este pakistaní libre para abrir? No se cuando verá a la esposa e hijos éste...
No comments:
Post a Comment